"El mundial lo tenemos dificil pero intentaremos sorprender"

El ex entrenador del Bidasoa y del Arrate, Jordi Ribera ,dirige al combinado albiceleste, que está concentrado en Eibar
Fuente :Diariovasco
Por Iñigo Aristizabal

A finales de septiembre Jordi Ribera recibió la llamada de la federación argentina y se decidió a cruzar el charco. Ahora está de vuelta y desde el lunes hasta el día 21 dirige una concentración con sede en Eibar y amistosos contra Bidasoa-Irún (Artaleku, mañana), Arrate (Deusto, el viernes), Euskadi (domingo, en Getxo), Cantabria (día 18) y Valladolid (día 21).

-¿Cómo surgió la posibilidad de ser el seleccionador de Argentina?-Desde que salí del Bidasoa -en marzo- estaba sin equipo y me llamaron de Argentina. Lo maduré y vi que podía ser una buena salida en el sentido de que iba a ser una experiencia distinta. También me motivaba poder participar en el Mundial. Llegué el uno de octubre.
-¿Qué se encontró al llegar?
-No hay una liga nacional, sino una en cada provincia y la más potente está en Buenos Aires. El primer mes fue para conocer cómo funcionaba todo y después empecé a salir a otras provincias, para conocer jugadores y también para hacer una concentración en el interior. Había bastante expectación al ser el primer seleccionador extranjero pero los problemas han ido a menos con el tiempo.
-¿Cuál es el nivel del balonmano argentino?
-Es un deporte totalmente amateur. Los jugadores trabajan y los entrenamientos suelen ser dos o tres por semana. Lo que sí me he dado cuenta es de que hay materia prima, jugadores con futuro. Sin embargo, muchos tienen que dejar el balonmano por los estudios o el trabajo.
-Al poco tiempo de llegar se tuvo que poner a preparar el Mundial.
-Seleccioné a nueve jugadores, que empezaron una preparación específica con algunos juniors. A finales de año hicimos una concentración con el resto de jugadores, los que militan en las ligas española e italiana. Salvo ellos, el resto de jugadores son amateurs.
-¿Cuáles son los puntos fuertes y débiles del equipo que dirige?
-Los jugadores argentinos siempre se han caracterizado por la lucha y agresividad con la que juegan. La intensidad es nuestra mayor baza. Por otro lado, hay lagunas a nivel ofensivo. A menudo, las ganas por llegar pronto a la portería contraria nos hacen caer en precipitaciones.
-Comparten grupo con Croacia, Suecia, España, Australia y Japón. Parece que las tres plazas para la segunda fase ya llevan nombre, ¿o quizás no?
-Es un grupo muy complicado. Primero, tenemos que pensar en ganar a Japón y Australia, sin creer que son fáciles, y después, en dar alguna sorpresa para así clasificarnos. Hace dos años, Argentina derrotó a Croacia y empató con Rusia, pero luego perdió en el partido decisivo con Arabia Saudí y no se clasificó. A ver si puede ser esta vez, aunque ya no iremos como Cenicienta, porque la propia Croacia estará sobre aviso por aquella derrota del 2002.
-¿Cómo ve a España?
-Siempre es una de las llamadas a estar arriba, una de las favoritas como pueden ser Croacia, Alemania, Suecia...
-¿Qué cree que sentirá al enfrentarse a España?
-Es el último partido de la primera fase y espero poder llegar con opciones. Supongo que tendré unas vibraciones especiales, pero tendré que verla como un rival más, por mucho que conozca a los jugadores.
-¿Cómo plantea esta concentración de once días en Eibar?
-Va a ser un test duro. He querido recortar el número de partidos y aumentar su nivel. Va a ser una puesta a punto importante para valorar a un equipo que allí no ha podido jugar partidos.